Buenos días a tod@s y feliz viernes!
En la entrada de hoy vengo a mostraros un trabajo con una técnica que hace mucho que no usaba y que no quiero olvidar porque fue el comienzo de mi andadura en el mundo de las manualidades, el punto de cruz.
Nuestra querida Ana Paula nos planteó en el Rincón de mis amigas como reto para marzo, un trabajo realizado para punto de cruz, y es por ello que me apunté sin pensarlo.
El trabajo consistía en bordar este diseño con el fin de realizar un trabajo para Pascua, es muy mono, verdad?
La idea de Ana Paula era usar el bordado para fabricar un huevo de Pascua, a ella le quedó muy bonito, pero yo quería usarlo para algo más útil, que pudiera servirme para algo más que adornar.
Me vino la inspiración mientras estaba en mi momento de relax.
Me encanta tomar una infusión a mitad de la tarde, y me gusta tomármelo en un vaso grande de cristal, ello conlleva que a veces me queme con el vaso.
Que me quemara quería decir, porque encontré la solución para que no me vuelva a pasar.
Una funda para el vaso para evitar quemaduras! Qué os parece? He pensado hacer una por cada estación o para fiestas especiales, una idea genial, verdad?
Muchas gracias Ana Paula por tu propuesta, gracias a ti he vuelto a coger la aguja después de tanto tiempo, no sé por qué no lo hago más a menudo porque me gusta y me relaja.
Me despido deseando que paséis unas Felices Pascuas, muchos besos y muchas gracias por vuestros amables comentarios.
Chus.